Remoción de Tatuajes
El pigmento de un tatuaje se asienta en la dermis, esta capa a diferencia de la epidermis, no tiene renovación celular y por lo tanto no elimina el pigmento. El láser es el “Gold Standar” en la remoción de tatuajes. El especialista programa las longitudes de onda correctas, los tamaños del punto correctos y los niveles de energía correctos para actuar de manera efectiva sobre los pigmentos y tintas no deseados. El láser específico se aplica directamente al tatuaje y con el paso del tiempo y la disciplina en las sesiones, el pigmento del tatuaje irá cediendo de manera natural hasta lograr la expectativa deseada.
La Remoción de tatuaje logra:
Fragmentar el pigmento o tinta del tatuaje para ser evacuada de manera natural
Recuperar la melanina en el área tatuada
Visibilizar la piel en su textura natural
El tratamiento:
Se realiza por sesiones sin incapacidad
Varía generalmente entre 4 a 8 semanas